Cuando nos enamoramos de Jesús, la alegría y la paz llegan a nuestras vidas. Al enamorarnos de Jesús, encontramos plenitud en la vida. Porque el Señor Jesús vino a la tierra para que pudiéramos disfrutar la vida al máximo. El amor de Jesús cambia nuestros corazones y comenzamos a amar a los demás.
El amor de Jesús por nosotros es ilimitado. Él demostró su amor por nosotros muriendo en la cruz. Cuando oramos, adoramos y meditamos en la Palabra de Dios, entendemos más profundamente el amor de Jesús.
Jesús es nuestro verdadero amigo, por lo que podemos confiar en él incluso en tiempos difíciles. Todas sus promesas son verdaderas y él nunca nos descuidará.
Enamorarse de Jesús significa que debemos obedecer sus mandamientos. Jesús dijo: “Si me aman, guarden mis mandamientos”. Amar a Jesús significa creer en él y crecer en sus enseñanzas.

“Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero”
— 1 Juan 4:19

“Ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, lo tengo por basura, para ganar a Cristo”
— Filipenses 3:8

“Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente”
— Mateo 22:37

“El que tiene mis mandamientos, los guarda, ese es el que me ama; el que me ama, será amado por mi Padre, yo le amaré, me manifestaré a él”
— Juan 14:21

“Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”
— Romanos 8:38-39
“Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor”
— Juan 15:9

“¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti?fuera de ti nada deseo en la tierra”
— Salmos 73:25

“En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados”
— 1 Juan 4:10

“A quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable glorioso”
— 1 Pedro 1:8

“Con Cristo estoy juntamente crucificado, ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó se entregó a sí mismo por mí”
— Gálatas 2:20
“Para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad la altura, de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios”
— Efesios 3:17-19

“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”
— Juan 15:13

“En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos”
— 1 Juan 3:16

“Aquel, respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas, con toda tu mente; a tu prójimo como a ti mismo”
— Lucas 10:27

“Andad en amor, como también Cristo nos amó, se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda sacrificio a Dios en olor fragante”
— Efesios 5:2

“Respondió Jesús le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; mi Padre le amará, vendremos a él, haremos morada con él”
— Juan 14:23

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16

“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”
— Romanos 5:8
“Te amo, oh Jehová, fortaleza mía”
— Salmos 18:1
“El que no amare al Señor Jesucristo, sea anatema. El Señor viene”
— 1 Corintios 16:22
“Me llevó a la casa del banqueteY su bandera sobre mí fue amor”
— Cantares 2:4

“Amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, de toda tu alma, con todas tus fuerzas”
— Deuteronomio 6:5

“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento”
— Marcos 12:30

“Como el ciervo brama por las corrientes de las aguasAsí clama por ti, oh Dios, el alma mía”
— Salmos 42:1

“El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí”
— Mateo 10:37

“Sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto”
— Colosenses 3:14

“Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, conoce a Dios”
— 1 Juan 4:7

“Pues este es el amor a Dios, que guardemos sus mandamientos; sus mandamientos no son gravosos”
— 1 Juan 5:3

“Conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna”
— Judas 1:21
“Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que estos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos. Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas. Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas”
— Juan 21:15-17

“Porque el amor de Cristo nos constriñpensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron”
— 2 Corintios 5:14
“El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno. Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros”
— Romanos 12:9-10

“El Señor encamine vuestros corazones al amor de Dios, a la paciencia de Cristo”
— 2 Tesalonicenses 3:5
“Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor”
— Apocalipsis 2:4

“Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros”
— Juan 13:34

“Pero el que guarda su palabra, en este verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él”
— 1 Juan 2:5

“Pero la gracia de nuestro Señor fue más abundante con la fe el amor que es en Cristo Jesús”
— 1 Timoteo 1:14

“Porque mejor es tu misericordia que la vidaMis labios te alabarán”
— Salmos 63:3

“Porque los montes se moverán, los collados temblarán, pero no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz se quebrantará, dijo Jehová, el que tiene misericordia de ti”
— Isaías 54:10

“Jehová está en medio de ti, poderoso, él salvará; se gozará sobre ti con alegría, callará de amor, se regocijará sobre ti con cánticos”
— Sofonías 3:17

“Nosotros hemos conocido creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; el que permanece en amor, permanece en Dios, Dios en él”
— 1 Juan 4:16

“Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado”
— Juan 15:12

“Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia”
— Jeremías 31:3
“La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor inalterable. Amén”
— Efesios 6:24

“Jehová, la habitación de tu casa he amadoY el lugar de la morada de tu gloria”
— Salmos 26:8

“No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él”
— 1 Juan 2:15
“Les he dado a conocer tu nombre, lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, yo en ellos”
— Juan 17:26

“El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor”
— Romanos 13:10

“Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros”
— 1 Juan 4:11

“Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraréLe pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre”
— Salmos 91:14

“Mis ovejas oyen mi voz, yo las conozco, me siguen”
— Juan 10:27

“Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él”
— 1 Juan 3:1

“¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?”
— Romanos 8:35
“Apenas hube pasado de ellos un pocoHallé luego al que ama mi almaLo así, no lo dejéHasta que lo metí en casa de mi madreY en la cámara de la que me dio a luz”
— Cantares 3:4

“Si alguno me sirve, sígame; donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará”
— Juan 12:26

“En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor”
— 1 Juan 4:18

“Por lo demás, hermanos, tened gozo, perfeccionaos, consolaos, sed de un mismo sentir, vivid en paz; el Dios de paz de amor estará con vosotros”
— 2 Corintios 13:11

“Amo a Jehová, pues ha oídoMi voz mis súplicas”
— Salmos 116:1

“Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, su amor se ha perfeccionado en nosotros”
— 1 Juan 4:12
“Yo en ellos, tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que tú me enviaste, que los has amado a ellos como también a mí me has amado”
— Juan 17:23

“En esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos”
— 1 Juan 2:3

“La esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado”
— Romanos 5:5
“Porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor”
— Gálatas 5:6

“En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él”
— 1 Juan 4:9

“Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; el que en mí cree, no tendrá sed jamás”
— Juan 6:35

“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida”
— Juan 8:12

“Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá”
— Juan 11:25

“Sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”
— Romanos 8:28

“El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo”
— 1 Juan 2:6

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer”
— Juan 15:5