Hoy hablaremos sobre cómo clamar a Dios por ayuda. Todos enfrentamos momentos en la vida en los que nos sentimos profundamente heridos por algo y sentimos una gran necesidad de ayuda. En esos momentos, debemos recordar que si clamamos a Dios, Él responderá nuestras oraciones.
Si observamos la vida de David, veremos que enfrentó numerosas situaciones difíciles y peligros. Se salvó de todas esas situaciones solo clamando a Dios. Expresaba su dolor a Dios desde su corazón mediante la oración, y Dios lo libraba de todo.
De la historia de Jonás, podemos aprender que Dios nos salva de nuestras vidas miserables. Cuando Jonás estaba en el vientre del enorme pez, clamó a Dios, y Dios lo libró de su terrible situación. De esto, podemos aprender que no importa cuán lejos nos alejemos de Dios o cuán desesperada sea nuestra situación, Dios siempre escucha nuestras oraciones y obra por nosotros.
Esperar la ayuda de Dios no significa faltarnos al respeto. Significa honrar a Dios y entregarle nuestras vidas. Cuando nos entregamos a Dios, renunciando al orgullo de nuestro corazón y orando por su ayuda, Él obrará milagros en nuestras vidas.
Veamos los siguientes versículos bíblicos que hablan de clamar a Dios por ayuda.

“Claman los justos, Jehová oyeY los libra de todas sus angustias”
— Salmos 34:17

“En mi angustia invoqué a Jehováclamé a mi DiosÉl oyó mi voz desde su temploY mi clamor llegó delante de él, a sus oídos”
— Salmos 18:6

“Invócame en el día de la angustiaTe libraré, tú me honrarás”
— Salmos 50:15

“Cercano está Jehová a todos los que le invocanA todos los que le invocan de veras”
— Salmos 145:18
“Entonces claman a Jehová en su angustiaY los libra de sus afliccionesCambia la tempestad en sosiegoY se apaciguan sus ondasLuego se alegran, porque se apaciguaronY así los guía al puerto que deseaban”
— Salmos 107:28-30
“En cuanto a mí, a Dios clamaréJehová me salvaráTarde mañana a mediodía oraré clamaréél oirá mi voz”
— Salmos 55:16-17

“Me invocará, yo le responderéCon él estaré yo en la angustiaLo libraré le glorificaré”
— Salmos 91:15

“Amo a Jehová, pues ha oídoMi voz mis súplicasPorque ha inclinado a mí su oídoPor tanto, le invocaré en todos mis días”
— Salmos 116:1-2

“Clama a mí, yo te responderé, te enseñaré cosas grandes ocultas que tú no conoces”
— Jeremías 33:3

“Aconteció que después de muchos días murió el rey de Egipto, los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, clamaron; subió a Dios el clamor de ellos con motivo de su servidumbre. oyó Dios el gemido de ellos, se acordó de su pacto con Abraham, Isaac Jacob. miró Dios a los hijos de Israel, los reconoció Dios”
— Éxodo 2:23-25
“DijoInvoqué en mi angustia a Jehová, él me oyóDesde el seno del Seol clamémi voz oíste”
— Jonás 2:2

“Pacientemente esperé a Jehováse inclinó a mí, oyó mi clamor”
— Salmos 40:1

“Desde la angustia invoqué a JAHY me respondió JAH, poniéndome en lugar espacioso”
— Salmos 118:5

“En mi angustia invoqué a Jehováclamé a mi DiosÉl oyó mi voz desde su temploY mi clamor llegó a sus oídos”
— 2 Samuel 22:7

“Entonces invocarás, te oirá Jehová; clamarás, dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el dedo amenazador, el hablar vanidad”
— Isaías 58:9
“Invoqué tu nombre, oh Jehová, desde la cárcel profundaOíste mi voz; no escondas tu oído al clamor de mis suspirosTe acercaste el día que te invoqué; dijiste: No temas”
— Lamentaciones 3:55-57

“En el día de mi angustia te llamaréPorque tú me respondes”
— Salmos 86:7

“Decía yo en mi premura: Cortado soy de delante de tus ojosPero tú oíste la voz de mis ruegos cuando a ti clamaba”
— Salmos 31:22
“Samuel tomó un cordero de leche lo sacrificó entero en holocausto a Jehová; clamó Samuel a Jehová por Israel, Jehová le oyó”
— 1 Samuel 7:9
“Si mal viniere sobre nosotros, o espada de castigo, o pestilencia, o hambre, nos presentaremos delante de esta casa, delante de ti (porque tu nombre está en esta casa), a causa de nuestras tribulaciones clamaremos a ti, tú nos oirás salvarás”
— 2 Crónicas 20:9
“Entonces los entregaste en mano de sus enemigos, los cuales los afligieron. Pero en el tiempo de su tribulación clamaron a ti, tú desde los cielos los oíste; según tu gran misericordia les enviaste libertadores para que los salvasen de mano de sus enemigos”
— Nehemías 9:27
“Con mi voz clamaré a JehováCon mi voz pediré a Jehová misericordiaDelante de él expondré mi quejaDelante de él manifestaré mi angustia”
— Salmos 142:1-2
“Será por señal por testimonio a Jehová de los ejércitos en la tierra de Egipto; porque clamarán a Jehová a causa de sus opresores, él les enviará salvador príncipe que los libre”
— Isaías 19:20
“Oye, oh Dios, mi clamorA mi oración atiendeDesde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayareLlévame a la roca que es más alta que yo”
— Salmos 61:1-2

“Pero a medianoche, orando Pablo Silas, cantaban himnos a Dios; los presos los oían”
— Hechos 16:25
“Cristo, en los días de su carne, ofreciendo ruegos súplicas con gran clamor lágrimas al que le podía librar de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente”
— Hebreos 5:7
“Oye la voz de mis ruegos cuando clamo a tiCuando alzo mis manos hacia tu santo templo”
— Salmos 28:2
“No escondas de tu siervo tu rostroPorque estoy angustiado; apresúrate, óyeme”
— Salmos 69:17
“Oh Jehová, Dios de mi salvaciónDía noche clamo delante de tiLlegue mi oración a tu presenciaInclina tu oído a mi clamor”
— Salmos 88:1-2
“Jehová, escucha mi oraciónY llegue a ti mi clamor”
— Salmos 102:1
“De lo profundo, oh Jehová, a ti clamoSeñor, oye mi vozEstén atentos tus oídosA la voz de mi súplica”
— Salmos 130:1-2
“Meteré en el fuego a la tercera parte, los fundiré como se funde la plata, los probaré como se prueba el oro. Él invocará mi nombre, yo le oiré, diré: Pueblo mío; él dirá: Jehová es mi Dios”
— Zacarías 13:9
“Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame”
— Mateo 14:30
“La gente les reprendió para que callasen; pero ellos clamaban más, diciendo: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros! deteniéndose Jesús, los llamó, les dijo: ¿Qué queréis que os haga?”
— Mateo 20:31-32
“Oyendo que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! muchos le reprendían para que callase, pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí”
— Marcos 10:47-48
“Alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros”
— Lucas 17:13
“Entonces dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! los que iban delante le reprendían para que callase; pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí”
— Lucas 18:38-39
“Clamó Asa a Jehová su Dios, dijo: ¡Oh Jehová, para ti no hay diferencia alguna en dar ayuda al poderoso o al que no tiene fuerzas! Ayúdanos, oh Jehová Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos, en tu nombre venimos contra este ejército. Oh Jehová, tú eres nuestro Dios; no prevalezca contra ti el hombre”
— 2 Crónicas 14:11
“Cuando los hijos de Israel clamaron a Jehová, a causa de los madianitas”
— Jueces 6:7
“Con todo, tú atenderás a la oración de tu siervo, a su plegaria, oh Jehová Dios mío, oyendo el clamor la oración que tu siervo hace hoy delante de ti”
— 1 Reyes 8:28

“Vuelve, di a Ezequías, príncipe de mi pueblo: Así dice Jehová, el Dios de David tu padre: Yo he oído tu oración, he visto tus lágrimas; he aquí que yo te sano; al tercer día subirás a la casa de Jehová”
— 2 Reyes 20:5
“Ciertamente el pueblo morará en Sion, en Jerusalén; nunca más llorarás; el que tiene misericordia se apiadará de ti; al oír la voz de tu clamor te responderá”
— Isaías 30:19

“Porque no menospreció ni abominó la aflicción del afligidoNi de él escondió su rostroSino que cuando clamó a él, le oyó”
— Salmos 22:24
“Porque en ti, oh Jehová, he esperadoTú responderás, Jehová Dios mío”
— Salmos 38:15

“Escucha, oh Dios, la voz de mi quejaGuarda mi vida del temor del enemigo”
— Salmos 64:1

“Ayúdanos, oh Dios de nuestra salvación, por la gloria de tu nombreY líbranos, perdona nuestros pecados por amor de tu nombre”
— Salmos 79:9

“A Jehová clamé estando en angustiaY él me respondió”
— Salmos 120:1

“El día que clamé, me respondisteMe fortaleciste con vigor en mi alma”
— Salmos 138:3

“Los afligidos menesterosos buscan las aguas, no las hay; seca está de sed su lengua; yo Jehová los oiré, yo el Dios de Israel no los desampararé”
— Isaías 41:17

“Antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído”
— Isaías 65:24

“Haciendo venir delante de él el clamor del pobreY que oiga el clamor de los necesitados”
— Job 34:28

“Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo”
— Romanos 10:13

“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”
— 1 Pedro 5:7

“¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas”
— Santiago 5:13
“De la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos”
— Apocalipsis 8:4